jueves, 28 de febrero de 2008

Espejo



Segundos plomizos vuelan sin rastro

no hay estela ni registro, al menos allá

en el afuera

En cambio, por dentro se acentúan puntillosamente

como agujas clavadas en los ojos


No quiero exagerar, pero vos me entendes

me entendes?

es perderse en la nada, suspendido en el espacio

pero el tiempo acelerado

y la tortura arremete, dale que dale


Como una sombra en compañía, bien pegada

busca contacto y diálogo

pero siempe la nada

fria, reclama

pide y pide obsesivamente hasta el consumo


Asi los huesos se astillan y el equilibro se esfuma

que vértigo!

desprenderse para luego volver a encontrarse y desprenderse

es la danza de la nada

la otredad es la que llama


Ahora somos uno, bien ensamblados

a veces me reconocen y otras tantas, la nada

en el fondo, el reflejo ilumina su color

adormecido por ese arcoiris

fantasma por las calles

simplemente, la nada

lunes, 25 de febrero de 2008

Palabras cruzadas



El cafe negro

Sueños, delirios y relidad

Gente que viene y va

Ella sentada a mi lado

Perdida en el fondo de su taza

El aire espesaba poco a poco

Del otro lado alguien dijo: "que linda estas... tan erotica"

Ojos oscuros y punzantes se colgaban de las palabras

El cigarrillo de su boca se perdia

El deseo mordiendo la carne lastimaba

Risas, susurros y aliento

Lentamente se acerco

Y tímidamente contestó: "Gracias... es que estoy tan dormida".

Punto

viernes, 15 de febrero de 2008

Como un pedazo de madera




Soy un pedazo de madera flotando en el océano

completamente mojado por dentro y por fuera

me mantengo, y me pierdo

me conecto con las profundidades mas oscuras

mientras los peces y otros seres comen de mi


****


Hay un punto de inflexión

siento que la sal corre dentro de mí

y voy girando porque el viento lo requiere

puedo mirar el cielo y sentir que el sol me acompaña

no tengo rumbo ni tiempo


****


Alguna vez perteneci a un elemento mayor

fue mi guia y mi sustento

pero un día se quebro

y de esa masa gigantezca, salí yo

el movimiento me calma por completo


****


Siento que voy y vengo

pero mucho más voy

no se exactamente a que orilla me acerco

no se si alguien espera

no se si hay un "alguien"


****


Si salgo me seco y se que es inevitable

todos los que salen se secan

pero igual mantienen la sal

y no por eso deban confundirme

porque igual mantengo la forma y el color


****


Hoy me crucé con una botella que portaba un mensaje

y sin quererlo me hice dueño del mismo.

Pude reconocer la letra y el papel

Pude recordar que yo mismo lo había escrito

cuando todavia, no era un pedazo de madera

Ahora que recuerdo, prefiero flotar en el oceano

martes, 12 de febrero de 2008

Ecos



Sus manos crispadas, denotaban un reflujo alterado de su sangre. Podía verlas claramente deformadas, gracias a una visión parcial de los hechos.


Ese estado, de alguna manera se correspondía con un presumible estancamiento en su pensar. Digamos que no podía encontrar la llave precisa que diera justo con la apertura exacta de una falta de luminosidad que muchas veces el destino niega.


Pensémoslo de este modo, comparativamente hablando, encontramos una explicación posible y es que una red de pensamientos contraproducentes para el aura de su conciencia, se iban entretejiendo unos con otros dentro de su corteza racional, formando así una fina pero pegajosa telita, por la cual ella misma, como una mosquita, se transformaba en su propia víctima.


Era tenderse en el sofá, y mirar el ángulo del techo exageradamente inflamado por una filtración de antaño. Esa humedad, se conectaba de algún modo con los fluidos que producía su corazón, lleno de sinsabores que se generaban ante cada decepción que su vida presentaba.


Un tufo a soledad flotaba en el ambiente, increíblemente podía respirarse de un modo denso y defectuoso. Qué otra manera posible cuando ya nadie llama a la puerta?


Se había perjurado no derramar ni una lágrima más por gente que no valiera la pena. Es que justamente no podía discernir entre aquellas personas que realmente eran de su importancia y las que no.


Cuando su teléfono llamó a la realidad, se sobresaltó y de un respingo se incorporó frente al artefacto, sintiendo en sus entrañas una acidez que encendía en llamas todo su cuerpo.


Temerosa y como pudo, levantó el tubo. Cuando la voz que ella tanto odiaba, dio apertura al diálogo desesperado, sus manos más que nunca se crisparon, denotando un reflujo alterado de su sangre, que violentamente pero en libertad corría perdida por la alfombra que nadie recordará…